divendres, 22 d’octubre del 2010

Reflexions abans d’una votació. A qui votar i com ?

Ja tenim les properes eleccions al Parlament convocades i el 28 de novembre tindrem que passar per les urnes per escollir als nostres representants. I aquí be el dilema, a qui votem? I ha algun partit que ens mereixi alguna confiança? No passa un dia que no obrim els diaris i ens trobem amb tota mena de escàndols, corrupteles, picabaralles, desqualificacions...
L’espectacle donat pels polítics envers la pancarta de la manifestació, en contra de la sentencia de l’estatut, així com la resposta tan contundent que es tenia que donar, va ser patètic. No així la ciutadania, que va donar una resposta exemplar i modèlica, amb un missatge clar i diàfan als polítics. Que varen fer la nostra classe política? Doncs passar del poble. Ells a la seva.
Ara tenim que escollir nous representants. Nous? Però si seran els mateixos, que ens prometran “l’ or i el moro”, per desprès , en nom de les estratègies de partit, seguir amb les mateixes trifulgues a que ens tenen acostumats. Que fer doncs?. Abstenció? No es democràtic, hi ha que mullar-se. Vot en blanc?. Home doncs potser si. Però que els contin. Si tothom ho fes, fins i tot pujaria la participació. Que més podem fer els ciutadans, per donar entendre als polítics que estem tips d’aquesta nefasta manera de fer política? Com podrem fiscalitzar-les les promeses electorals que son oblidades sistemàticament? A on anem a reclamar? Com els hi diem, que no volem que ens enganyin mes, ni ens vengeu sopars de duro, -els 633 € a qui no treballi ni estudií, per exemple -. Sigueu seriosos, actueu amb seny. Penseu amb el país. Penseu amb els qui dieu que voleu defensar. Quanta falta fa una nova llei electoral!

diumenge, 11 de juliol del 2010

ARA ES L’HORA


Jo també i vaig ser. Catalunya va parlar amb veu pròpia i ho va dir clarament. Aquesta Espanya, del segle XXI, no la volem. Felicito a la ciutadania que ahir va sortir al carrer a manifestar-se, per dir prous als insults, prou a les desqualificacions, prou a la ignorància, prou a la manipulació, prou a les mentides, prou al politics incompetents, prou a la intoxicació per part d’uns mitjans de comunicació, -suposadament professionals-, prou a l’enverinament de la gent normal i pacifica. Prou a tant de desgavell.
Per això va sortir la gent al carrer, la gent normal, amb famílies senceres, de totes les classes socials, de totes les edats, amb respecte, d’uns als altres , amb educació, amb civisme, amb alegria, i amb responsabilitat.
Com diu el nostre himne, ara es l’hora... catalans, ara es l’hora politics, de que us poseu a treballar seriosament, i us prengueu la vostra feina amb serietat, el poble de Catalunya, us dona una última oportunitat, no els defraudeu, treballeu per lo que vareu ser elegits, ara de debò, demostreu que sou uns servidors del poble al servei del poble.
Esperem i desitgem que aquest missatge d’una bona part del poble de Catalunya, doni els seus fruits i sapigueu donar resposta a aquest clam aclaparador, també us demaneu que sapigueu explicar amb suficient claredat, aquest sentiment expressat al carrer, a tots aquells que dins de casa nostra, es pensen que son quatre exaltats separatistes i manipulats. Crec que ahir va quedar molt clar qui som i quants som. Ara es l’hora!

dissabte, 20 de febrer del 2010

La segunda reconversión.


En los albores de los años 80 se produjo en España una reconversión industrial de los medios de producción, para adaptar nuestra industria, -sobre todo la naval y la siderurgia-, a la nueva situación internacional del trabajo. Esta reconversión implicaba un recorte drástico de la capacidad productiva y el grado de ocupación en muchas empresas. Hubo cierre de empresas y muchos trabajadores engrosaron las filasd del paro.
Todo eso fue fruto de los Pactos de la Moncloa suscritos en 1978, pero no se pudieron poner en practica hasta bien entrada la década de los ochenta como ya hemos indicado. Eran años en que España salía de una profunda crisis económica, -como todo el mundo occidental-, a consecuencia de lo que fue llamada la crisis del petróleo de los 70, en nuestro país, agravada por los acontecimientos de todos conocidos. La muerte del dictador, la frágil y a veces convulsa transición que le siguió y que al final desembocó en el frustrado golpe de Estado de febrero del 81.
En toda Europa a raíz de la crisis del petróleo, empezaron las traumáticas reconversiones indústriales, pero en España, por las razones ya apuntadas no se pudo realizar hasta mediados de los 80. Por lo tanto se hizo tarde y mal. Como siempre.
Cuando empezaba la década de los 90, parecía que de la crisis del petróleo y la reconversión industrial ya nadie se acordaba, además había unos buenos augurios; Barcelona acababa de llevarse la adjudicación de los Juegos Olímpicos del 92, y la Expo de Sevilla’92, por tanto prometíamos la construcción de grandes infraestructuras, para estos eventos.
Todo empezó a dispararse, la construcción llego a cotas insospechadas y pasó a convertirse en motor de la economía de España. Importamos como nunca mano de obra -cualificada y no cualificada-, el levante español hervía de fervor constructivo, -las grúas no dejaban ver el mar-, el precio de los pisos sufría alzas continuas sin ningún control.
Todo se disparó, el crecimiento no tenia límite, coches, -varios por familia-, electronica, comercios, bazares chinos, bares, restaurantes, oficinas de viajes, vacaciones al extranjero, vuelos “low cost”, fabricar, producir, gastar, vender, comprar. Pisos, apartamentos en la costa, vehículos 4x4….
Oleadas de inmigración clandestina, mano de obra barata, cuanta mas mejor.
El aeropuerto de Barajas, el gran coladero de toda la inmigración sudamericana, con visados de turista, recibía a familias enteras. España era El dorado de Europa, los papeles se habían intercambiado.
Leyes de extranjería, para regular el flujo inmigratorio, si, pero incumplidas sistemáticamente. Había trabajo para todo el mundo. El mundo laboral lo absorbía todo.
Y así dos décadas. España generando empleo a espuertas con el boom de la construcción, y la masiva llegada de gentes de todo el mundo atraídos por la bonanza de nuestra boyante economía -eso si basada en el ladrillo y el turismo-.
Nuestro país era el paraíso de especuladores de todo el mundo, invirtiendo sin cesar en nuevas promociones. Los bancos dispensando hipotecas, y lanzando ofertas para un consumo desmesurado y sin fin.
Ya habíamos alcanzado en PIB a Italia, y pronto alcanzaríamos a Francia. “España va bien”, decía el gobierno de Aznar, y Zapatero se lo creyó. Ambas administraciones estando en el poder, mirando hacia otra parte, mientras nuestra economía, se subía al carro de la especulación y el crecimiento ilimitado.
Y en estas vino la crisis financiera con las “subprime” americanas, espoleadas por los tiburones de Wall Street. Y la catástrofe. En un mundo globalizado, la crisis repercutió primero a las economías occidentales y después al resto del mundo. Cada gobierno reacciono en función de sus modelos económicos. Así parte de Europa i EE.UU., con economías basadas en el diseño y fabricación, con fuerte implantación de la innovación y sobre todo la exportación de productos de calidad, capearon la crisis, con sentido común, y con medidas inteligentes de sus gobernantes y apoyos responsables de sus respectivas fuerzas opositoras, van saliendo de esta impresionante recesión, que por otra parte estaba anunciada y era de prever que un crecimiento ilimitado e insostenible, algún día tenia que regularizarse.
Todos menos España. España adalid de la cultura del pelotazo, de la especulación, de la chapuza, y del dinero fácil, con mano de obra poco cualificada y con un tasa de producción, por debajo de la media europea, no encuentra la salida, no tiene alternativa para su modelo productivo.
Parches y palos de ciego por parte de gobierno, y atizando el fuego la oposición.
Si a todo esto añadimos una clase política, que ha sido incapaz de anteponer el bien común, por encima de sus intereses partidistas, -no demasiado alejada, por otra parte de los estándares europeos-, pues ya tenemos el crac.
Ya no se trata de un cambio de gobierno, no tenemos políticos en este país con suficiente intuición y preparación para buscar salidas a la crisis. No con este modelo económico. Y no parece que nadie,. -ni derecha ni izquierda- tiene la varita mágica, y la solución. Basamos nuestro sistema productivo en “fabricar” pisos sin saber si se podían vender, y arrastramos a un sin fin de gremios que contaban con la industria de la construcción, para desarrollar sus productos. Muerta la gallina de los huevos de oro, se acabo la fiesta. Se crearon empresas, industrias y centenares de puestos de trabajo a rebufo de la construcción. No hay alternativa. Sobra de todo. Todo estaba sobredimensionado.
Conclusión, nos costara salir de la crisis, hace falta mucha imaginación para cambiar el modelo productivo. Ya hay expertos que saben cual es el modelo, y donde esta la solución. Hace falta una segunda reconversión industrial, basada en otros parámetros. Los actuales están obsoletos, ya no sirven.
Ahora solo falta que los políticos escuchen, y si no lo hacen, los ciudadanos tendríamos que tener la última palabra, en nuestra mano están los votos. Es el momento de la reflexión. ¿A quien se los damos?.... o no se los damos.
Nuestra clase política no ha hecho gala de merecer nuestra aprobación.
¿Dónde está la solución….?

dijous, 7 de gener del 2010

Reflexiones en torno al AVE

Marzo 2007

En el año 1992 (hace 15 años) y con ocasión de la Expo de Sevilla, es de suponer que por meras razones electorales y no por demanda social o logística, el tren de Alta Velocidad llegó a Sevilla. Felipe González era presidente del gobierno, y para más señas sevillano.
Catalunya y Barcelona, había experimentado un boom de crecimiento a raíz de los juegos olímpicos, con importación de mano de obra cualificada provinente de Portugal y de algunos países del este europeo, con lo que empezaba un ciclo de llegada de inmigración de muchos otros países. La construcción no cesaba de crecer, la densidad de las poblaciones en lugar de esponjarse cada vez era más tupida, las urbanizaciones crecían por doquier nuevos sistema de transporte, tranvías, nuevas infraestructuras, cinturones perimetrales, que llegaban con un retraso de 20 años se introducían con calzador entre mar y montaña y entre los resquicios que quedan entre ciudades pegadas entre si… Mares de grúas envolviendo Barcelona y su área metropolitana. Así año tras año. Un buen día a alguien se le ocurre que el AVE tendría que llegar a Barcelona. Se discute el trazado, se cambia (el trazado) una y otra vez en función de alianzas políticas y otros oscuros intereses. Y cuando por fin se llega a un acuerdo, el territorio esta tan saturado, que hay que hacer verdaderos galimatías para poder encajarlo y buscar un palmo de tierra libre.
Mientras tanto la aviación civil experimenta un despegue espectacular con la aparición de compañías llamadas low cost, los precios están por los suelos y por pocos euros puedes viajar casi a los confines de la tierra. El monopolio del puente aéreo se le acaba a Iberia y otras compañías esperan ansiosos la liberalización del mercado para poder ofrecerlo.
En otro orden de cosas, en el vecino país –Francia- con una larga trayectoria de alta velocidad que cubre buena parte del territorio, su TGV que es como allá se llama tiene su final en la ciudad de Nimes a 400 kilómetros de la frontera española, y no tienen ninguna intención por el momento de prolongarlo hasta Perpiñan y la Junquera.
¿Alguien se ha preguntado a estas alturas de la película que falta nos hace el AVE que viene de Madrid para ir a Barcelona y de aquí hasta la Junquera? ¿Que haremos en La Junquera? ¿Coger un tren que nos lleve a Nimes, para alli coger la alta velocidad para comunicarnos con Europa? Teniendo tres aeropuertos en Catalunya : Girona, Barcelona y Reus y compañías de bajo coste, ¿tenemos que montar el tremendo desaguisado con que nos está obsequiando Fomento?
Y por último, se critica des de los medios la tremenda pasividad, el conformismo y la falta de movilización de la ciudadanía ante tantas desgracias que esta sufriendo Catalunya en los últimos tiempos. No será que después de las macro manifestaciones en todo el territorio en contra de la guerra, y el despotismo con que respondió la clase gobernante, alguien cree que vale la pena mojarse por nuestra clase política. Será que muchos debemos creer como decimos en catalán: “Tot està dat i beneït”

Cadascu al seu lloc (el posa la vida)

Juliol 2006

Hi ha una dita popular que diu que la vida posa a cadascú al seu lloc. I es tarda mes o menys però quasi sempre s’acaba acomplint. Els darrers temps en estat plens d’esdeveniments protagonitzats per les forces més reaccionaris del conservadorisme, - dit amb tot el respecte de la filosofia conservadora- les quals pregonaven unes veritats inqüestionables, fent-ne bandera dels seus postulats. Ací i arreu del mon
En refereixo al tema tant escandalosament usat de les armes de destrucció massiva com excusa perfecta per atacar un país sobirà, o el fi de la prepotent era Berlusconi, enderrocada per la força dels vots, la decisió del Tribunal Suprem dels EEUU. de condemnar la política de menyspreu dels drets humans del president Bush, a dues passes de les eleccions presidencials, l’aprovació de l’estatut de d’autonomia de Catalunya, sense trencar-se res, el possible fi de la violència etarra, fruit del diàleg i la negociació, - d’altra banda l’única manera d’afrontar-ho, desprès de 40 anys de mètodes policíacs -, l’escrupolosa legalitat de la que ha fet i fa gal•la l’ex-president Aznar, fins que es demostra que també te debilitats.
Semblava que la raó estava sempre al costat del mateixos i de mica en mica totes aquelles veritats inqüestionables o cauen o es demostra que tot era pura demagògia. Jo espero i desitjo que quant es espanyols tornin a ser cridats a les urnes, treguin la intel•ligència que la immensa majoria tenen i posin al seu lloc a cadascú.

Reflexiones para después de una manifestación

18-02-2006)
Creo que se puede hablar de un antes y un después del 18 de febrero. Una parte importante de Catalunya ha dicho claramente lo que piensa, ya no son los políticos los que se interesen por la reforma estatuaria (oído Brunete). ¿Que lectura debe hacerse de esta manifestación? ¿Habría que retirar el Estatut, pues se expone a que no se apruebe en referendo? ¿ Habrá que modificar antes la Constitución ( recuérdese que esta se aprobó bajo la tutela de los poderes fácticos, léase militares ) como proponía hace poco el Consejo de Estado? No seria mejor esperar por donde sale la pacificación de Euskadi, que quiérase o no deberá pasar por una relación muy, pero que muy especial España / Euskadi. Para corroborar esta afirmación deberiase ver el documental “La pelota vasca”, no hay que ser un lince para saber que quiere la inmensa mayoría del pueblo vasco.
Esta legislatura no es proclive a aprobar estatutos.
Primero hay que modificar la Constitución pensando en el siglo XXI, colocar a los militares en el lugar que les corresponde como una entidad mas del estado de derecho, definir de una vez por todas el papel de la Iglesia en el Estado, y sobre todo educar a la derecha, para hacerla democrática y europea, así acabarían los espectáculos de Salamanca, los predicadores mediáticos y las intoxicaciones de la Faes.
Si esta legislatura transcurriese sin estatutos por el medio con el conflicto vasco encarrilado, sin papeles que devolver, la crispación menguaría –a menos que surgieran conflictos de debajo las piedras, pues hay algunos que son expertos- y si el tripartito catalán se estuviera callado, y todos los políticos se dedicaran a trabajar en aquello por lo qué les hemos votado, llegaríamos al final de la legislatura y volverían a convocarse nuevas elecciones. Y si la inmensa mayoría de españoles tuvieran buena memoria y la suficiente inteligencia -que la tienen- volverían a colocarse las cosas en su sitio y seguramente los acontecimientos transcurrirían por otros cauces. Más democráticos y más civilizados.

Reflexió després del desastre de l’huracá Katrina

18-12-2005
Durante la guerra fría había la creencia de que las dos superpotencias EE.UU y la URSS, un buen día entrarían en conflicto y se desataría una guerra mundial, pues ambas poseían ingentes depósitos de armas nucleares. Pero vino la caída del muro y con ella el desmoronamiento del imperio de la URSS, vimos que se trataba de un gigante con pies de barro: armamento obsoleto, barcos que hacían agua, miseria, corrupción e incompetencia a raudales.
Los EE.UU. de América a la vista del mundo occidental, era y es la gran potencia, en armamento, en tecnología, en grandes empresas multinacionales, el país donde los sueños se hacen realidad. Un país montado en el dólar. Ha tenido que ser un desastre natural, -por lo demás predecible- que ha puesto al descubierto lo que mucha gente ya sabia: un país donde existen las mayores desigualdades sociales, donde el estado del bienestar, -estandarte de Europa (la vieja por supuesto)- no existe, donde más analfabetismo existe en proporción a su nivel de renta, y donde la xenofobia y la discriminación racial, alcanza cotas insospechadas.
En Europa hay un pequeño país que una vez su preclaro dirigente decidió que ya era hora, de que éste, ocupara el lugar que le correspondía en el mundo y en la historia y se alió con las grandes superpotencias, para llevar la democracia, la paz y el bienestar occidental a un país de oriente medio, sin darse cuenta que su propio país estaba en la cola de Europa en todas las encuestas que se publicaban: en educación, en sanidad, en prestaciones sociales, en exportaciones, en productividad, en tecnología, y en un largo etcétera.
Conclusión. Vivimos una época de permanente confusión, donde se nos hace comulgar con ruedas de molino, dónde la política está al servicio de lobbys y donde los ciudadanos son meros marionetas. Se impone un golpe de timón. Pero quien?

La Opa de Gas Natural

Reflexió del 10 de setembre de 2005

Es profundamente indignante la última andanada lanzada por la cúpula tripartita del PP y sus acólitos mediáticos, lanzada contra Catalunya, a raíz de la Opa de Gas Natural sobre Endesa. Es la constatación de que cualquier acontecimiento que tenga por protagonista a Catalunya, sea del cariz que sea, -este asunto es una mera cuestión económica, y en clave económica y no política debe analizarse-, siempre se aprovecha por el PP para predisponer al resto de España contra esta comunidad, a veces de forma tan grosera e ignorante como esta que nos ocupa.
Afortunadamente creo, es mas, estoy seguro que entre los votantes y simpatizantes del PP impera el sentido común y la inteligencia de la que tan faltos están últimamente sus dirigentes. Flaco favor está haciendo la mano oculta que mueve los hilos de este partido, llámese Faes o lo que sea, a esta España que tanto aman.

Voto en blanco

Reflexió feta el 17-10-2004
Después de las últimas elecciones municipales y europeas, aparecieron en La Vanguardia escritos donde se reivindicaba el derecho al voto en blanco e incluso se proponía la constitución de un partido, para los desengañados que tienen que utilizar esta opción.
Volverá a cobrar actualidad esta postura, -creo- y espero que prolifere en abundancia, a ver si por fin se da por enterada la clase política, de que no confiamos en ellos, que nos tienen sin cuidado, que les hemos visto el juego (sucio por supuesto) Que han dejado de ilusionarnos. Que hemos visto con decepción lo que realmente pretenden. Satisfacer su ego, sentarse en una poltrona. Cobrar un buen sueldo, y mentir, mentir mucho y insultar al contrincante. Les importa un bledo, el paro, la carestía de la vivienda, las deficientes infraestructuras, y todo lo que sea bienestar y progreso de sus conciudadanos.
Por eso creo que se impone un nuevo modelo de sociedad con gentes o partidos nuevos que crean en el prójimo, en la solidaridad, y sobre todo con un alto grado de altruismo y de servicio a la sociedad.
¿Es esto una utopía?

Trato informativo de La Vanguardia

Reflexio feta el 24-04-2004

Puede que La Vanguardia tenga fama de diario conservador, pero no se le podrá negar cierto pluralismo en el tratamiento de las informaciones. Si bien mantiene una línea editorial, entre progresista y pragmática, en sus paginas caben las opiniones a veces encontradas de diferente signo político. Buena prueba de ello es y ha sido el tratamiento que esta dando a los acontecimientos que últimamente estamos padeciendo casi encadenados, y parece que solo es el principio: la guerra de Irak, el tripartito catalán, el 11- M, el 14-M la investidura, etc. De este tema hablaba hace pocas semanas con el obusdman de La Vanguardia, el señor Casasús, de las opiniones y sus repercusiones que sobre la guerra de Irak han ido desbrozando los diferentes analistas y colaboradores que a lo largo de los últimos meses se han asomado a las paginas de este periódico.
Destacando a mi modo de ver las crónicas de Robert Fisk y los análisis pormenorizados y documentadísimos de William R. Polk, sin olvidarnos de plumas tan dogmáticas como las de Gorbachev, Soares, Naomi Klein. También han sabido analizar con exquisitez Lluis Foix y Xavier Batalla -por cierto señor Batalla, comparto con usted, esta digamos “obsesión” por los neos americanos y su famoso PNAC, creo que valdría la pena no cansarse de divulgar lo terrible de los verdaderos objetivos de esta fundación, o thalt tink y sus verdaderos intereses-.
De todo lo cual deduzco que el último periodo que acabamos de padecer en España, no puede englobarse, dentro de una forma de gobernar más o menos escorada a la derecha, sino que ha sido una nefasta manera de afrontar los problemas, como jamás se había vivido en los veinticinco años de democracia de este país y creo que ninguna democracia del mundo haya pasado por semejante situación en toda su historia.
¿Que han sido años de progreso y de bonanza económica? Sí. Pero habría que buscar las verdaderas razones de este progreso. No hay que olvidar que los ministros económicos de la democracia, de todos los colores alguna parte de mérito tendrán. Que los fondos de cohesión que tan generosamente llegaron de Europa gracias al pedigüeño González y al mayor aportador de recursos de la UE -Alemania- ayudaron a financiar cuantiosos recursos de las regiones mas desfavorecidas